viernes, 28 de junio de 2019

Provocado por la apropiación cultural

Hoy voy a hablar del absurdo tema de la apropiación cultural, que está de moda. Yo creo que no había oído hablar de este concepto hasta que una asociación de gitanas flamencas acusó a Rosalía de ello (a Rosalía le han dado hasta en el carné de identidad por todo en general, cualquier excusa es buena).
O a lo mejor sí que había oído hablar de ello pero no con ese nombre, una amiga de Benín acusó a Angelique Kidjo de eso mismo: de apropiarse de la tradición de su país y presentarla como una creación propia.

El country adoptó el violín de la música celta, el flamenco incorporó el cajón peruano, el fado se quedó con la guitarra inglesa, la influencia africana en toda la música en general es innegable. Y luego está M.I.A. que podrían decir que se ha apropiado de todos los sonidos del mundo.

A primera vista podría parecer que hay una competi entre Rozalén, María Arnal y Raquel Lúa por ver quién imita más y mejor a Silvia Pérez Cruz pero el argumento se cae rápido teniendo en cuenta que la propia Silvia dijo hace tiempo que había escuchado a muchas ancianas por los pueblos de Estepaís (a.k.a. España) que cantaban igual que ella. No sé si alguien acusó a Silvia de impostar el acento andaluz cuando formaba parte de Las Migas, que digo yo que cada uno podrá hablar y cantar con el acento que le apetezca.

¿Y el cine de qué se apropió? ¿Y los videojuegos? ¿Y la pintura hiperrealista se apropia de la realidad? ¡Cuánta tontuna!

La cultura no son sacos de manzanas a granel. Las manzanas no se plagian, se roban. Si se usan dos verbos distintos será porque no es exactamente lo mismo. La cultura tendría que compartirse (además de venderse para garantizar un mínimo sustento vital de sus creadores, recopiladores y transmisores). No se trata de pagar derechos de autor a la R.A.E. por usar cada palabra del diccionario ni a los romanos cada vez que pisemos una carretera pero estaría bien que la gente que intenta vivir de algo relacionado con el arte lo consiguiera y tuviera el reconocimiento que merece (si es posible en vida).

jueves, 28 de marzo de 2019

Provocado por Rocío Márquez (de nuevo)

Hace justo un mes Teo Sánchez organizaba un programa especial en Casa Patas con entrevista y avance de algunos temas en directo del nuevo disco de Rocío Márquez que se pondría a la venta pocas horas después.

El 15 de septiembre del año pasado, antes del concierto Momentos Alhambra en Barcelona, Ernesto Novales me dio cuatro pistas acerca del nuevo disco de Rocío, me gustó tanto lo que oí que creo que me puse a aplaudir dando saltitos cual GIF de Twitter. Pensé que era el disco que le faltaba para que se animaran a escuchar cómo canta los que todavía no lo habían hecho.

El disco se compone únicamente de tres elementos: la voz perfecta de Rocío, la guitarra original y creativa de Canito y la percusión precisa y discreta de Agustín Diassera. A veces no hace falta más para que algo te llegue.

Es un disco de largo recorrido. Da para muchas y espaciadas escuchas y estos son algunos de los momentos que más me han llamado la atención y emocionado:
- “Luz de Luna” entera.
- El final espectacular de “Trago Amargo”.
- En “Entorna la puerta” hay doce segundos de éxtasis sonoro a un minuto y seis segundos del final del tema.
- “No Sentir” te deja como si ya lo hubieras sentido todo cuando acaba.
- La primera vez que escuché “Llegar a la meta” en directo estuve los cuatro minutos con la boca abierta.
- Mis favoritas son el “Quiero” de Bambino al que le ha quitado dramatismo pero le ha aportado una profundidad que hace que quieras escucharla en bucle hasta que te hartes y “Más Verdad”, ya me gustaba la letra cuando se la había escuchado en directo alguna vez y los arreglos de Canito desde la introducción al oleaje de notas en la parte central me parecen una genialidad.
- Creo que los bonus track empiezan con los ladridos lejanos del perro pero no queda muy claro. En cualquier caso podrían de igual modo haber sido los temas centrales. Los dos fandangos con los que suele acabar los recitales de flamenco clásico (con dos arreglos tan diferentes de Canito) son para entrar a vivir.
- Es curioso cómo juega con la voz en las coplas: parece que se le va a quebrar pero sin llegar a hacerlo (esa cuerda floja por la que camina siempre Silvio Rodríguez) en el “crujío frío y seco” para luego soltar toda la potencia antes del último “se nos rompió el amor” (¡cómo coge aire ahí!).
-“Andaluces de Jaén” con Kiko Veneno.

Resumiendo: que es un discazo y que esta noche vuelve a ofrecer un adelanto en el Teatro Maestranza de Sevilla dentro de un espectáculo dividido en tres partes bautizado como “Alternativas”, jugando con la proximidad de la plaza de toros, y el 10 de abril será el estreno absoluto en los Teatros del Canal de Madrid dentro del exitoso Festival Internacional de Arte Sacro (quedan algunas entradas en el anfiteatro a precio de caña y tapa en Malasaña) en el que ya participó hace unos días con su “Sinestesia” frente a cuadros de Rubens del Museo Del Prado.

lunes, 7 de enero de 2019

Provocado por las expectativas


Si nada lo impide este 2019 para mí viene con un Low y un Viña Rock debajo del brazo. También con Vicky Gastelo en la Galileo, Leiva en el Palacio de los Deportes, con Rocío Márquez y Jorge Drexler en Pamplona entre otros conciertos, no creo que muchos más.

Caerán nuevos discos de Rocío Márquez, Leiva y Rayden. Quique González dijo el otro día que estaba preparando algo para este año pero no especificó si era un disco o una gira o qué.

Espero bastante de los nuevos discos de Rayden y de Leiva; Rocío Márquez va a un ritmo de discazo por año ("Diálogos de Viejos y Nuevos Sones" es una delicia de llorar a lágrima viva) y ella siempre supera las expectativas.

A ver si cae libro nuevo de Carlos Castán y con esto para mí ya estaría, ya me compensaría el 2019 aunque mi hermana se haya encargado de recordarme desde el primer día del año que a lo largo del mismo se producirá un hecho relevante: cumpliré cuarenta años. Es muy simpática ella.